21 agosto 2012

Einstein tenía razón

Constelación de Pegaso. Estrellas
y objetos de cielo profundo.
Este fin de semana pasado tuve la oportunidad de visitar la voladora constelación del caballo alado, es decir, Pegaso, con el clásico asterismo de su cuadrante. La noche estaba sin Luna y prometía, por lo que empecé a escudriñar toda la constelación obteniendo como resultado, después de tres horas de trabajo constante y planificado con anterioridad, la observación y dibujo de 12 estrellas dobles y múltiples, un racimo globular muy denso (M15) y una galaxia muy parecida a nuestra Vía Láctea (NGC 7331). De todas las estrellas múltiples la Épsilon Pegasi, también denominada Enif (la boca del caballo alado), llamó poderosamente mi atención al saber que se trataba de un sistema triple que como estrella principal tenía una supergigante naranja en las etapas finales de su vida, con una luminosidad equivalente a 6.700 soles y la luz que estaba viendo desde el ocular de mi telescopio salió de Enif cuando el Papa Juan XXII estableció que el Ángelus se rezara por la tarde (año 1.318) en lugar del mediodía como hoy.

Racimo compacto M 15 a 30.000
años luz de nosotros.
Aunque no se trataba de ninguna doble no pude resistirme a posicionar el tubo óptico hacia la estrella de tipo solar 51 Pegasi, una caldera nuclear de fusión a 50 años luz de nosotros y en la cual se halla orbitando el primer planeta extrasolar descubierto en 1.995, con una masa muy superior a la terrestre. A partir de este primer exoplaneta los descubrimientos han sido cuantiosos y siguen aumentando progresivamente, cada vez con mayor rapidez.

Esquema de trayectorias de luz
en una lente gravitatoria.
Las imágenes de objetos distantes
adquieren forma de arcos rodeando
el objeto masivo intermedio

Supongo que debido a una asociación de ideas, ya que cuando estoy en mi Catedral del cielo (léase Observatorio astronómico) mis conexiones neuronales están en constante actividad eléctrica y contemplando el Cuadrado de Pegaso me vino a la mente el caso de Newton, la manzana cayendo y la gravedad, anécdota que todo el mundo conoce y que se halla publicada por un testimonio de primera mano en la edición de la biografía de Sir Isaac Newton, escrita por el doctor William Stukerey, físico y amigo de Newton.

Pensé en Newton por lo de la gravedad y que debido a esta, hasta la luz puede curvarse, según atestiguo Albert Einstein en su Teoría de la Relatividad General. Él le llamó Lentes Gravitacionales. En astrofísica una lente gravitacional, se forma cuando la luz procedente de objetos distantes y brillantes como quásares se curva alrededor de un objeto masivo (como una galaxia) situado entre el objeto emisor y el receptor.

La Cruz de Einstein




En el año 1919 se pudo probar la exactitud de su predicción. Durante un eclipse solar el astrónomo Arthur Eddington observó cómo se curvaba la trayectoria de la luz proveniente de estrellas distantes al pasar cerca del Sol, produciéndose un desplazamiento aparente de sus posiciones. Los fenómenos de lentes gravitatorias pueden utilizarse para detectar la presencia de objetos masivos invisibles, tales como agujeros negros, la materia oscura e incluso planetas extrasolares.

Ampliación de la Cruz de Einstein
Por suerte, entre la Tierra y un quásar situado a 8.000 millones de años luz hay una galaxia que está a 400 millones de años luz. La fuerza de la gravedad de la galaxia actúa como una lente enorme pero imperfecta que encamina en trayectorias diferentes la luz del quásar, que es como un punto; así se producen las cuatro imágenes que hay en torno a la galaxia y que adoptan la forma de un trébol.

En este caso el efecto lente gravitatoria produce una cruz simétrica porque la galaxia que actúa como lente se halla casi exactamente en nuestra línea de visión del quásar. Esta forma de cruz lleva el nombre de Cruz de Einstein. La imagen fue obtenida por el telescopio espacial Hubble. ¡Ah, por cierto! La cruz de Einstein se halla en la constelación que tenía ante mis ojos, aunque la visión de la Cruz no fue posible verla con mi máquina del tiempo. Con el Hubble no puedo competir.

Creo que definir es limitar, por lo cual no pretendo definir lo que sentí durante las tres horas de dedicación a Pegaso, aunque sí que me gusta compartir el disfrute de los placeres astronómicos. A la sabiduría por la astronomía.

Tot Astronomia

1 comentarios:

¿cómo podría encontrar la Cruz de Einstein en el cielo? quiero decir, ¿qué nombre debería poner en el mando del goto? gracias

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