Esquema de la simulación de las fases lunares |
Muchas veces utilizamos la Luna para indicar una
solicitud imposible "pedir la
Luna ", la ausencia de la realidad "estar en la Luna de Valencia", un
estado de ánimo "estar de buena o mala Luna" e incluso un estado de
intimidad conyugal "estar de Luna de miel". Esta última frase, aunque
pueda parecer que se diga así por la dulzura de la ceremonia y los días
posteriores, tiene su origen en los teutones (pueblo germánico del norte de
Europa). Los guerreros teutones tenían la costumbre de celebrar las ceremonias
de boda únicamente los días de Luna llena, posteriormente y durante 30 días,
los novios bebían licor de miel, considerado un buen afrodisíaco. Pero el único
satélite natural de la Tierra ,
ajeno a todo lo que se diga de él por los humanos, realiza invariablemente su
viaje alrededor del planeta azul en 27 días, 7 horas y 43 minutos, el mismo
tiempo que tarda al dar un giro alrededor de su eje. Esto hace que la Luna nos presente siempre la
misma cara.
Recorrido de la Luna y fases visibles desde la Tierra |
Ya que la
Luna gira alrededor de la Tierra , la luz del Sol le llega desde posiciones
diferentes, que se repiten en cada vuelta. Cuando se le ilumina toda la cara,
se le llama Luna llena o vieja y cuando está entre la Tierra y el Sol, su disco
se convierte en invisible y entonces se trata de una Luna nueva. Entre estas
dos fases se encuentra el cuarto creciente, cuanto vemos iluminado la mitad de
su disco, el que mira a poniente y el cuarto menguante, cuando su mitad
iluminada mira a levante.
Otra visión de la órbita lunar y las fases visibles desde el hemisferio norte de la Tierra |
Para que esta idea sea más comprensible nos
adentraremos en una sencilla demostración. Necesitaremos una bombilla desnuda
encendida, una pequeña pelota (de tenis o de ping-pong) y nuestra cabeza. La
bombilla hará las funciones del Sol, la pelota será la Luna y nuestra cabeza la Tierra. Ahora hay
que hacer oscura la habitación y sujetar la pelota-luna frente de nosotros. Nos
pondremos de pie mirando la bombilla y veremos la pelota oscura, por qué el
lado iluminado de la pelota está orientado lejos de nosotros. Esta posición representa
la Luna Nueva,
oscura y lista para nacer. Giraremos nuestro cuerpo hacia la izquierda,
sujetando la pelota frente a nosotros y veremos un cuarto delgado, ligeramente
iluminado por el lado derecho de la pelota y si aún giramos más a la izquierda hasta
que el Sol nos quede a la derecha podremos observar, en esta posición, que la
mitad de la Luna
está iluminada. Esta fase nos indica la fase del Cuarto Creciente. Si seguimos
girando hacia la izquierda, con el Sol detrás nuestro, la Luna tiene todo un lado
visible. Estamos contemplando una Luna Llena o Vieja. Hay que tener en cuenta
que si la pelota está directamente en la sombra de nuestra cabeza, será
necesario levantar la Luna-pelota hacia de alto, ya que si no fuera así
provocaríamos un eclipse de Luna. Si ahora nos giramos un poco más, de modo que
la bombilla nos quede a nuestra izquierda estaremos ante la fase del Cuarto
Menguante, para más adelante pasar otra vez a la fase de Luna Nueva.
Para aplicar esta simulación a la realidad,
únicamente es necesario salir a la calle de noche y con nuestros propios ojos
localizar la Luna ,
averiguar en qué fase se encuentra y seguirla durante todo su proceso. Podemos usar
algunos dichos, muy orientativos para distinguir cada una de las fases lunares:
"Luna creciente, cuernos a oriente" o "Barriga a levante es
cuarto menguante y barriga a ponente es cuarto creciente". Que tengáis una
buena observación lunar. A la sabiduría por la astronomía.
Tot Astronomia
1 comentarios:
Entrada súper interesante. La verdad es que en las lunas podría estar la clave de la vida en nuestro sistema solar, ¿no crees?Te dejo un vídeo interesante: https://gabrielrosselloblog.wordpress.com/2017/03/03/satelites-naturales/
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